Sabemos que al terminar tu rutina de peso lo que MENOS quieres hacer es subirte a una caminadora, escaladora o elíptica a hacer tu sesión de cardio, pero te contamos algunos de los beneficios de no saltártelo.

ENERGÍA A TOPE

Incrementan el nivel de energía y aumentan la capacidad de resistencia mejorando nuestra condición física. Fortaleciendo el corazón y los pulmones.

BAJA DE PESO

Si tu objetivo principal es perder peso, el entrenamiento cardio disminuye la grasa corporal. El cardio ayuda a quemar muchas calorías, acelera nuestro metabolismo y mejora nuestro Índice de Masa Corporal (IMC).

TE ENFERMAS MENOS

Ayuda a controlar la presión arterial y fortalece el sistema inmunológico. Mejora la circulación sanguínea e incrementa el ritmo cardíaco lo que provoca que los vasos sanguíneos se dilaten permitiendo un mayor flujo de glóbulos blancos, que son los encargados de protegernos de los virus e infecciones.

CONTROLA TUS NIVELES DE COLESTEROL

El cardio ayuda a reducir el colesterol malo y aumenta el colesterol bueno. El ejercicio aeróbico ayuda a reducir los valores de LDL (malo) y se relaciona con el aumento del HDL (bueno), ya que moviliza el colesterol en la sangre.

ESTABILIZA Y EQUILIBRA LOS NIVELES DE AZÚCAR

Evita la diabetes tipo 2, ya que el ejercicio cardio disminuye la glucosa en la sangre.

Además, el cardio nos da una satisfacción de esfuerzo en el entrenamiento y de saber que cumpliste con tu Workout del día.

Si te cuesta hacer tus 30 min de cardio, puedes sustituirlo por 15 min. De HIIT, en menos tiempo de entrenamiento tendrás los mismos resultados al ser un ejercicio de alta intensidad. ¡Cuida tu salud Cardiovascular!