En repetidas ocasiones hemos hablado sobre las diferentes lesiones con las que nos podemos encontrar al practicar entrenamiento de pesas, de que manera las debemos de tratar y cómo lograr un regreso triunfal a las canchas al recuperarnos de la misma. Sin embargo, nunca hemos expuesto cuáles son las principales razones por las que algunas personas se lesionan en el gimnasio. Así que si te interesa saber todo esto y más sobre la prevención de lesiones, continúa leyendo nuestro blog.
4 causas de lesiones
Ejecución de ejercicios no adaptados a nuestro cuerpo
El gimnasio nos otorga una gran posibilidad de ejercicios con peso libre, autocargas o máquinas guiadas. Sin embargo, ni todos los ejercicios son aptos para nuestras características personales, ni todos son saludables: “Debemos huir de ejercicios que supongan un potencial peligro para nuestra columna. Es apropiado contar con la supervisión de un profesional que adapte tanto ejercicios como metodología de entrenamiento a nuestras limitaciones individuales y evite lesiones”.
Ejecución incorrecta
La efectividad de un ejercicio reside en su técnica (entre otros parámetros), por lo que al realizar un ejercicio de manera correcta podemos experimentar sus beneficios, ejecutarlo con una técnica inadecuada puede ser especialmente grave para nuestra salud articular y ocasionar lesiones. Varias son las razones por las que desatendemos la técnica de ejecución: ignorancia, inconsciencia, carga inadecuada a nuestra capacidad o cansancio acumulado. Recuerda que, para mantener una correcta postura, la espalda debe mantener su línea natural, sin variar la curvatura fisiológica de la espalda, musculatura estabilizadora conectada (recto abdominal, trasverso, dorsal ancho, extensores espinales, etc.) posición neutra a nivel lumbo-pélvico y escapulas conectadas. Intenta acompasar la respiración al ejercicio. Además, el peso soportado por un individuo queda notoriamente mejor repartido si mantenemos la posición natural (columna neutra).
Sobre entrenamiento o sobrecarga
Todo ejercicio debe corresponder a un estímulo que produzca una respuesta adaptativa de nuestro organismo. Cuando los estímulos a los que sometemos a nuestro cuerpo superan nuestro umbral de intensidad o los estímulos se dan sin un descanso correcto, perjudicará inevitablemente en nuestra espalda, ya sea para originar un dolor o mantenerlo. La tensión que soportan las lumbares es la principal causa de lesión. La mayoría de las lesiones lumbares no suceden en un evento puntual, en realidad son consecuencia del trauma repetitivo.
Movilidad articular y balance muscular
La flexibilidad de la columna vertebral está considerada uno de los factores destacados en el ámbito de la salud. Debemos atender a la musculatura postural y dinámica de la espalda, ya que una descompensación en el balance muscular de dichos músculos, puede derivar en una hipertonicidad (exceso de tono muscular) o hipotonicidad (disminución de tono muscular), suponiendo una fuente de patologías o dolores inespecíficos. Si atendemos a los grupos musculares de la cadera y su repercusión en los dolores de espalda, debemos de hacer especial mención al psoas iliaco, musculo flexor de la cadera más potente, el cual interviene en la gran mayoría de movimientos que realizamos en la vida diaria (andar, subir escaleras, correr).